He terminado de leer la cuarta entrega de Crónicas Vampiricas de Anne Rice, el Ladrón de Cuerpos. Con cada libro que leo me sumerjo más en esta fantástica aventura y siento a los personales, sobre todo a Louis y Lestat más cerca, más personales. Cada libro es mejor por el anterior por la fascinación de descubrir la aventura, de voltear la pagina y no saber que hay. Pero al mismo tiempo siento que ninguno es mejor que otro. Son todos completamente diferentes y cada uno es el mejor en su propia dimensión. Algo raro para explicar pero queria decirlo.
Cuando termino de leer un libro siento quizás la misma sensación de un vampiro cuando le quita la vida a su victima para poder alimentarse. No solo le quita la vida sino también sus recuerdos, sus pensamientos y sus deseos. Absorbe todo. A mi me sucede algo parecido. Al terminar el libro parece que absorbí la historia en si y la historia de los personajes. Como si fueran ya parte mio. Ademas me doy cuenta que disfruto mucho leer y lo cambiaría por muy pocas cosas. Cabe recordar es el segundo libro que leo en formato pdf impreso en una fotocopiadora. Realmente es muy difícil conseguir los ejemplares originales salvo que tengas la suerte de tu lado.
En esta oportunidad no aparecen muchos vampiros como en los libros anteriores. Salvo Lestat, Louis (en contadas apariciones), Maruis (solo una linea) y la pequeña Claudia (en los sueños de Lestat). Me gusto mucho que Lestat se relacionara más con el mundo real y dejara solo por un lado todo el séquito que lo rodea con sus planteamientos filosóficos acerca de su existencia, el bien y el mal, el Jardin Salvaje y otras cosas más que solo los fanáticos pueden saber. Ladrón es un libro lleno de aventura donde aparece un tal James que puede realizar cambios de cuerpo. Resulta que nuestro amigo Lestat se deja seducir por la idea de vivir nuevamente como hace siglos no lo hacia en su pueblo de Francia. El tenia idealizada a la vida humana pero su experiencia no le resulto muy agradable. Vivía enfermo de un resfrió, las necesidades básicas como comer e ir al baño lo atormentaban. También el no poseer sus grandes poderes como leer la mente, hacer mover objetos con simple hecho de pensar y el no poder volar hicieron que disfrutara el ser vampiro. Su amigo David Talbot, de la Talamasca, lo ayuda a recuperar su antigua forma. El final es para el infarto. Realmente muy bien hecho junto con otra sorpresa que omití contar. Guau, Guau...
Siempre lo haré y no me cansare de repetirlo por los siglos de los siglos o hasta que el blog llegue a su fin quien sabe cuando. 100% recomendable esta serie y este libro también. Leer es un gran disfrute para el alma y nuestra mente. Métanse de lleno en este fantástico mundo de Crónicas o en cualquier otra saga que os guste.
