Quickribbon El Oraculo Del Beno: Por fin grito campeón
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Por fin grito campeón

River le ganó a Olimpo por 2 a 1 en el Monumental y como Estudiantes no pudo con Colón de Santa Fe , el equipo de Núñez se coronó campeón del torneo Clausura 2008, cortando una racha de cuatro años sin títulos locales.

Con dos goles de Diego Buonanotte, a los 16 minutos del primer tiempo y a los 33 del segundo, los dirigidos por Diego Simeone se quedaron con el triunfo, mientras que Josemir Lujambio había puesto el empate transitorio para Olimpo a los 21 del complemento.

Así es que River necesitó salir campeón para que desde las tribunas bajara "Cholo, cholo" , el primer apoyo explícito contundente de la hinchada millonaria hacia el entrenador Diego Simeone.

Los 50 mil espectadores que llegaron hasta el Monumental pudieron explotar de euforia, no solo por la obtención del 33 campeonato local, sino también acordándose de la eliminación de Boca a manos del Fluminense en la Copa Libertadores.

Pero no solo los hinchas se acordaron del xeneize, sino también los jugadores, quienes cargaron con una camiseta con el número 33 que contaba con la leyenda: "La alegría nao tem fin", en el idioma del brasileño Fluminense.

Es que, hace tres semanas, River se hundía en la oscuridad con aquella eliminación de la Copa ante San Lorenzo que paralizó a un Monumental distinto, lúgubre.

Incluso, cuando el uruguayo Josemir Lujambio igualó el partido a 25 minutos del final, hubo, entre silencios, algún insulto masticado por el temor a pasar otra vez por una situación indeseable. Pero volvió Diego Buonanotte con una jugada lucida de Ariel Ortega a poner a River arriba y terminar con la victoria en la mano.

Quedaban cuatro minutos más antes de dar rienda suelta a los festejos, porque en La Plata quedaba ese tiempo para que termine el partido de Estudiantes, que necesitaba de una victoria ante Colón, pero no lograba y no lo logró.

La mayoría saltó del vestuario con la camiseta 33, apenas Sebastián Abreu se quedó en el campo de juego escuchando la radio con unos auriculares que le prestaron. Luego llegó la vuelta de los jugadores, con Radamel Falcao envuelto en la bandera colombiana y finalmente fue el turno del Cholo, acompañado por sus hijos.

Fue ahí cuando Simeone, después de medio centenar de partidos como entrenador de River en el Clausura, amistosos, de verano y de Copa, recibió su primera ovación plena. Bajó el "Cholo...Cholo" desde las tribunas.



 
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