Hace unas cuantas semanas atrás contaba sobre el terrible y vergonzoso escándalo que CQC (programa de televisión de mi país que además esta en muchos lados) demostró. El tema era que las donaciones a las escuelas no llegaba y los funcionarios públicos se quedaban con la mercadería. Con un ingenioso sistema de GPS encubierto en una TV se demostró donde iban a parar todas las cosas donada por la inocente gente.
Días atrás mi queridisima presidenta, CFK, anuncio la construcción de un tren bala que unirá las tres provincias más importantes de mi país. Para que se den una idea, solo estas tres de veinticuatro representan el 60% del total de la población argentina. Mucha gente. La presidente defendió el proyecto argumentando que es un "salto a la modernidad" y que "aliviara el transito en las trágicas rutas argentinas". Nadie le cuestiona eso. Lo que se discute es que con solo la mitad de los u$s 1.320 millones que se invertirá en el proyecto se pueden reconstruir miles de kilómetros de rutas de trenes, armar más kilometros nuevos y unir más puntos, reacondicionar los vagones, comprar más locomotoras y vagones, rearmar todo el tramo de subtes, mejorar el servicio, la lista sigue...
Para demostrar lo mal que se viaja en mi país y que no hace falta un tren bala con un boleto de más de 500 pesos (el mismo recorrido en avión sale la mitad y tarda también la mitad), Gonzalo (el notero, no yo) viajo desde Misiones (extremo norte de la Argentina) hasta Buenos Aires. ¿A que no adivinan cuanto tardo el tren en cumplir su destino? MÁS DE TREINTA HORAS DE VIAJE!!!!! ¿INCREÍBLE? NO!!!! ESTAMOS EN ARGENTINA....EL PAÍS DE NO CREER!!!!!!!
El tren se llama "Gran Capitán" y es una locomotora de más de cuarenta años de antigüedad. Tan vieja esta y tan mal están las vías que una persona trotanto llega más rápido. Como explicaba su maquinista, el mismo recorrido hace 20 años tardaba la mitad de lo que tarda ahora. ¿Que les puedo contar del servicio adentro del tren? No había extinguidores y su lugar estaba con una madera. Los baños eran una puerta con un agujero. Los asientos no eran para nada cómodos y las rodillas te tocaban la garganta de lo apretado que se va. Olvidate del comedor y aire acondicionado. Solo un mate cocido con galletas y unos pocos ventiladores del siglo pasado funcionando...
Terrible vergüenza (nuevamente) me dio. Terrible lastima ver a esa gente sufrir un día y algunas cuantas horas más en ese mal denominado tren...¨
Un mensaje desde este humilde lugar de opinión de una ciudadano argentino que te voto: no es tiempo del tren bala. Las prioridades son otras: el campo, la inflación, los escándalos por corrupción, mejorar los servicios públicos...no sigo porque tengo que hacer otras cosas...
